Halloween es una festividad esperada por muchas familias, pero también conlleva algunos riesgos, especialmente para los más pequeños. La Asociación Americana de Pediatría (AAP, por sus siglas en inglés) alerta que las lesiones de peatones infantiles aumentan más la noche de Halloween comparado con cualquier otro momento del año. Para disfrutar de la celebración sin preocupaciones, es importante tomar precauciones tanto en el recorrido por los vecindarios como en casa.
Acompañar a los niños más pequeños durante la tradicional búsqueda de dulces es fundamental. Si en tu área las actividades comienzan después del anochecer, busca opciones de eventos más temprano para evitar horarios peligrosos, ya que las horas entre las 6 p.m. y 9 p.m. presentan un mayor riesgo para los peatones. Para los adolescentes que prefieren salir solos, es recomendable planificar con ellos la ruta, establecer una hora de regreso y proporcionar linternas con baterías.
Hablar con los niños sobre los peligros de caminar distraídos usando el celular o escuchando música es una medida preventiva importante. También es esencial que crucen siempre por los pasos peatonales y no entre autos estacionados, ya que la mayoría de los accidentes ocurren lejos de las intersecciones. No hay que asumir que los conductores siempre se detendrán, por lo que se debe caminar por calles bien iluminadas y, si no hay aceras disponibles, hacerlo por el borde de la calzada de frente al tráfico.
Para quienes conducen, especialmente los adolescentes, es necesario fijar reglas claras. La AAP recomienda que los padres establezcan acuerdos de conducción segura para evitar distracciones y garantizar que tanto conductores como peatones disfruten de la noche sin incidentes.
Los disfraces son una parte esencial de Halloween, pero es necesario elegir opciones seguras. Se recomienda optar por disfraces brillantes o añadir elementos reflectantes para mejorar la visibilidad. Asegurarse de que los zapatos queden bien y que el largo de los trajes no provoque tropiezos es fundamental, al igual que verificar que las telas sean resistentes al fuego. En lugar de máscaras que dificultan la visión, el maquillaje no tóxico es una alternativa más segura, aunque conviene hacer una prueba previa para evitar reacciones alérgicas.
Si los disfraces incluyen accesorios como espadas o bastones, es preferible evitar aquellos con puntas afiladas para prevenir lesiones en caso de caídas. Además, no se deben utilizar lentes de contacto decorativos sin una receta médica, ya que su uso inadecuado puede causar daños graves en los ojos.
Ofrecer opciones no comestibles a los visitantes es una excelente alternativa para evitar problemas de alergias. La AAP sugiere considerar juguetes pequeños, como anillos luminosos o pegatinas, en lugar de dulces. También es recomendable revisar los dulces recolectados antes de que los niños los consuman para descartar productos dañados o sospechosos, prestando especial atención a posibles comestibles con cannabis que podrían confundirse con golosinas regulares.
Finalmente, es importante moderar el consumo de dulces en los días posteriores a Halloween. La AAP recomienda establecer reglas claras para enseñar a los niños hábitos de alimentación equilibrados, fomentando un consumo responsable.