El gobernador de Florida, Ron DeSantis, ha declarado un estado de emergencia en preparación para la tormenta tropical Milton, que presenta una alta probabilidad de convertirse en huracán. En su orden ejecutiva, DeSantis destaca la creciente demanda de fondos destinados a las agencias estatales y locales para el alivio y respuesta ante desastres, declarando que estos pueden ser insuficientes para hacer frente a esta emergencia.
Para abordar esta situación, se ha ordenado que se transfieran y expendan los fondos necesarios del Fondo de Preparación y Respuesta ante Emergencias. Además, todas las agencias estatales que emitan órdenes o reglas de emergencia deben notificar al Oficial Coordinador Estatal y presentar su declaración a la División de Audiencias Administrativas dentro de un plazo de cinco días.
La orden también permite que profesionales médicos y trabajadores sociales con licencias válidas de otros estados brinden servicios en Florida de forma gratuita, bajo la supervisión de la Cruz Roja Americana o el Departamento de Salud de Florida. Asimismo, se prohíbe el alquiler o venta de bienes esenciales a precios exorbitantes en las áreas afectadas por la emergencia.
DeSantis aclara que los «bienes esenciales» abarcan una variedad de suministros necesarios durante la crisis. Se permitirá que quienes entreguen estos bienes se desplacen dentro de las áreas evacuadas, siempre que se mantenga la seguridad y la integridad de las infraestructuras.
Finalmente, el gobernador autoriza a la Corporación de Finanzas de Vivienda de Florida a distribuir fondos a los condados y municipios afectados por la tormenta. Todas las acciones previas a esta orden por parte del Director de la División de Manejo de Emergencias han sido ratificadas, y la orden ejecutiva será efectiva inmediatamente, con una duración de sesenta días, a menos que se extienda.