En el marco del Mes de la Prevención del Suicidio, los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC) han publicado un informe que revela cómo factores económicos y sociales a nivel comunitario están asociados con el riesgo de suicidio en los Estados Unidos. Según el nuevo informe de Vital Signs, los niveles de cobertura de seguro médico, el acceso a Internet de banda ancha y los ingresos familiares juegan un papel clave en la prevención del suicidio.
En una conferencia de prensa celebrada el 10 de septiembre, Día Mundial de la Prevención del Suicidio, la Dra. Debra Houry, Subdirectora de Programación Científica de los CDC, subrayó la importancia de abordar estos factores para prevenir crisis suicidas antes de que ocurran. “A menudo, la prevención del suicidio se centra en las personas que están en crisis, lo cual es crucial, pero nuestra labor va más allá. Queremos aumentar los factores que promueven la resiliencia y reducir los que incrementan el riesgo”, explicó Houry.
El informe destacó que las tasas de suicidio son más bajas en condados donde las personas tienen mayor acceso a seguro médico, Internet de banda ancha e ingresos familiares más altos. En particular, los condados con mayor cobertura de seguro médico mostraron una reducción del 26% en las tasas de suicidio, mientras que en aquellos con mayor acceso a Internet de alta velocidad, la reducción fue del 44%.
“Sabemos que el seguro médico permite a las personas acceder a servicios de salud mental y atención primaria, mientras que el acceso a Internet puede conectar a las personas con recursos de prevención, oportunidades de empleo, servicios de telemedicina y, lo más importante, con amigos y familiares”, detalló la Dra. Alison Cammack, autora principal del estudio y Científica de Salud en el equipo de prevención del suicidio de los CDC.
El informe también señaló que los efectos de estos factores son más pronunciados en ciertos grupos demográficos, incluidos los hombres, las personas que viven en comunidades rurales, y los nativos americanos y nativos de Alaska. En condados con altos niveles de los tres factores clave, las tasas de suicidio para los nativos americanos y nativos de Alaska fueron la mitad en comparación con aquellos condados con menor acceso a estos recursos.
“Es esencial que trabajemos hacia un enfoque integral para la prevención del suicidio que aborde estas barreras”, afirmó Cammack, haciendo referencia a las dificultades que enfrentan muchas comunidades rurales y tribales para acceder a Internet y servicios médicos.
La doctora Houry señaló que los CDC, en colaboración con agencias estatales y locales, han estado trabajando en programas de prevención que mejoran las condiciones de vida y las conexiones sociales. “El desarrollo de programas y políticas que mejoren la estabilidad de la vivienda, la seguridad económica, la conexión a la comunidad y el acceso a la atención médica son cruciales para salvar vidas”, subrayó Houry.
El informe de Vital Signs también coincidió con la presentación de la Estrategia Nacional para la Prevención del Suicidio 2024, que busca prevenir el riesgo de suicidio desde sus raíces, abordando factores subyacentes como los descritos en el informe.
El Dr. Houry finalizó haciendo un llamado a la acción: “El suicidio es prevenible. Sabemos lo que funciona para detenerlo y evitar que más familias pierdan a sus seres queridos. Si tú o alguien que conoces está luchando con pensamientos suicidas, no dudes en pedir ayuda. La línea de vida 988 está disponible las 24 horas del día.”
Para obtener más información, consulte el informe completo en el sitio web de los CDC y visite la Suicide Prevention Resource for Action, una herramienta con acciones probadas que las comunidades pueden implementar para prevenir el suicidio.